Hola de nuevo lectores, hoy traigo... ¡Una entrevista! Lo que más me emociona es que es a una de mis escritoras favoritas, y por eso decidí enviarle una carta. La semana pasada me respodió y yo me quedé muy sorprendida, no porque no esperara su respuesta sino porque se me había olvidado que la había enviado 😅. Por cierto si no habéis leído la biografía de Laura Gallego pinchad aquí.
En fin que aquí os dejo la entrevista para que la disfrutéis.
ENTREVISTA A LAURA GALLEGO
¿Cómo y cuando empezaste a escribir? ¿Y a publicar?
Empecé a escribir más o menos con 10-11 años. Para entonces ya era una devoradora de libros y me gustaba imaginarme que vivía aventuras en los mundos de las historias que leía. Empecé escribiendo algún cuento que otro y con 11 años comencé mi primera novela a medias con una amiga del colegio. Tardamos tres años en acabar aquel primer libro; a los 13 yo ya tenía claro que quería ser escritora. A los 14 tenía terminada mi primera novela y empecé a enviarla a editoriales y concursos. No hubo suerte; tampoco con la segunda novela que escribí (esta vez yo sola), ni tampoco con la tercera, ni con la cuarta… durante los años siguientes seguí escribiendo libros y relatos y participando en concursos. Sí, llegué a perder la esperanza de publicar algún día, pero eso no me impidió seguir escribiendo, porque me encanta escribir. Así que, ya que escribía, pues seguía mandando cosas… y así, a los 21 años, mi novela Finis Mundi ganó el premio Barco de Vapor de literatura infantil y juvenil. Había participado varias veces en aquel concurso pero nunca había habido suerte, hasta ese momento. Finis Mundi era en realidad mi libro número 14 (los trece anteriores no vieron la luz), pero se convirtió en la primera novela que publicaba. Y desde entonces no he parado :-).
¿C0mo te insipiras para escribir?
Llevo escribiendo e inventando historias desde que era muy pequeña, así que tengo mucha práctica. Por otro lado, leo mucho, así que tengo la imaginación muy bien alimentada y es una fuente de ideas constante. Sin embargo, las ideas no surgen porque sí, a veces hay que buscarlas. Y cuando las encuentras, no se encajan ellas solas para formar una trama coherente, eso tienes que hacerlo tú, pensando, reflexionando… A las ideas, a las historias, hay que dejarlas madurar, darles tiempo. No es instantáneo ni pura inspiración. Una historia es como un puzzle de múltiples piezas. Puede que la primera pieza “te llegue” sola, pero el trabajo de un escritor no consiste en esperar a que llegue la inspiración. Las otras piezas hay que buscarlas, y luego es necesario encajarlas pacientemente hasta obtener algo que tenga sentido. En resumen, las historias no “se me ocurren”: las construyo.
De todos tus libros publicados, ¿cuál es tu favorito? ¿y el que te gusta menos?
Mi favorito es Memorias de Indhú, porque es una historia que me ha acompañado durante una buena parte de mi vida (empecé a imaginarla con 14 años). No sé si es el mejor; creo que eso tendrán que decidirlo otras personas más objetivas que yo. Pero es el libro al que más cariño le tengo. También le tengo un cariño especial a Por todas las hadas del renio.
El que menos me gusta es Mandrágora. No creo que sea un mal libro; tiene más de diez años y en todo este tiempo lo han disfrutado miles de lectores. Pero creo que lo escribí de forma un tanto precipitada y no me quedó tan redondo como me habría gustado.
¿Por qué escribes para jóvenes?
La respuesta corta y reivindicativa sería: “Porque también los jóvenes tienen derecho a leer”. Y, aunque es verdad que pienso esto, la realidad es un poco más compleja y menos romántica. Lo cierto es que cuando escribo mis libros no pienso en la edad de la gente que me va a leer. Escribo sobre todo lo que me gustaría leer a mí y, sorprendentemente, resulta que conecto especialmente bien con los adolescentes. Digo que es sorprendente porque yo hace tiempo que dejé atrás esa edad. Sin embargo, es un hecho que, aunque escribo lo que me gusta a mí, mis lectores tienen mayoritariamente entre 10 y 25 años. De lo cual estoy muy orgullosa, porque siempre he pensado que alguien de 13 o 14 años no es menos persona o menos lector que un adulto.
Recuerda esta frase lector: Que l amagia de las palabras guíe tus pasos hasta un reino fantástico.